DIVORCIO. IMPACTO EN LOS NIÑOS.

DIVORCIO. IMPACTO EN LOS NIÑOS.

Desde la legalización del divorcio en España cada año son muchas las parejas que deciden poner fin a sus relaciones matrimoniales.

Según el INE (Instituto Nacional de Estadística) durante el año 2010 en España se produjeron un total de 110.321 disoluciones de matrimonios (7.248 fueron separaciones, 102.933 fueron divorcios y 140 nulidades matrimoniales). El 57,7% de estas disoluciones matrimoniales eran de parejas con hijos.

Con la siguiente entrada queremos exponer cual es el impacto que estas disoluciones matrimoniales tiene en los hijos de la pareja. También haremos un breve apunte de cuales deberían de ser las actitudes de los padres para facilitar al máximo que sus hijos vivan los cambios que provocan estas disoluciones en sus vidas.

COMO VIVEN LOS NIÑOS LA SEPARACIÓN DE LOS PADRES SEGÚN SU EDAD.

Para cualquier niño una separación matrimonial supone un duro golpe e impacto.

Pero son los niños pequeños los que sufren más esta separación. No tienen capacidad cognitiva suficiente para entender todos los matices que hay detrás de una separación y viven este hecho como un abandono o rechazo.

Los niños de entre 4 y 5 años pueden sentirse apenados y tristes. Suelen presentar miedo a estar solos o negativas a querer ir al colegio y cuando asisten están mas inquietos y en alerta.

Entre los 6 y 7 años a todos estos sentimientos se suma la rabia y cierta tendencia a culpar a uno de los progenitores por la situación que se esta viviendo.

Una vez llegada  a la adolescencia los niños suelen querer huir del dolor que les provoca la ruptura de sus padres. Suelen ser más reflexivos y muchos pueden llegar a empatizar con la infelicidad de sus padres y comprender la situación. Esta mayor capacidad reflexiva también les hace preocuparse por la nueva situación económica que van a vivir.

ALGUNAS PAUTAS AYUDAR A LOS MENORES DURANTE ESTE PROCESO.

ANTES DE LA RUPTURA

Evitar involucrar a los niños en las disputas y peleas previas a la ruptura. SI el matrimonio va mal es importante mantener delante de los menores unas actitudes y comportamientos de respeto mutuo, intentar mantener un entorno familiar tranquilo y buscar momentos en que los menores no estén presentes para poder hablar de los problemas familiares. 

LA RUPTURA

Informar a los niños antes de que un miembro de la pareja abandone el hogar familiar e informar conjuntamente padre y madre. Es preferible hacer el anuncio durante un fin de semana donde los menores tendrán tiempo para poder hablar y preguntar sus dudas sin las exigencias escolares.

No hacer anuncios sorpresa sino una separación gradual. Dar tiempo a los niños a que se adapten poco a poco a los cambios.

Hablar con los hijos desde el primer momento y oír que tiene que decir al respecto.

El anuncio de la separación se ha de hacer sin dramatizar y ajustando la información a la edad de los menores. Es importante durante esta conversación concretar que la vida familiar cambiara ya que ya no vivirán juntos pero que las relaciones madre-hijo padre-hijo seguirán siendo las mismas.

El procedimiento legal y las condiciones económicas no interesan a los hijos, suelen ser motivos de conflicto y debemos mantener a los niños al margen.

Hay que respetar la reacción de cada niño y estar presentes para oír lo que tengan que decir.

Pero sobretodo transmitir en esta primera conversación la no culpabilidad de los niños.

DESPUES DE LA RUPTURA

No menospreciar al otro miembro de la pareja delante de los menores. Un niño que vive una separación conyugal puede temer que igual que se ha acabado el amor entre sus padres algún día también se acabe el amor que le tienen hacia él. Por ello es importante seguir mostrándonos afectuosos con los niños, expresando la incondicionalidad de la relación y del amor que se procesan.

Mantener unos referentes estables para el pequeño: la casa, la escuela, las relaciones sociales creadas…etc.

Como hemos ido exponiendo una disolución matrimonial o de pareja tiene un fuerte impacto emocional en los niños pero también en los padres. La única forma de hacer este proceso lo menos doloroso posible es mantenido una actitud de respeto entre los miembros de la pareja. Des culpabilizando a los hijos. Manteniendo los vínculos paternos filiales y maternos filiales y  transmitiendo confianza en que la vida familiar, con la nueva situación mejorará.

Bibliografía:

Estadísticas de nulidades, separaciones y divorcios. Año 2010. http://www.ine.es/prensa/np673.pdf

Anne fundación. Guia para padres. http://www.annefundacio.org/docs/guiadepadresdivorcio.pdf

Silvia Pastor Lopez
Psicóloga
Col. 17944